Spanish – Proclamation of Power

Proclamación de Poder

 

 

¡Óigannos, espíritus de las tinieblas! Nosotros, el pueblo de Dios, somos ungidos para dar buenas nuevas a los pobres, sanar a los quebrantados de corazón, pregonar libertad a los cautivos, a poner en libertad a los oprimidos, y a predicar el año agradable del Señor, y estamos afirmados, fuertes y valientes en nuestra llamada.  Recordamos a los principados y potestades, que las Santas Escrituras en su autoridad absoluta declaran que nosotros que creemos haremos obras aun mayores que las que hizo Jesús.  Los primeros discípulos de nuestro Señor declararon, “Aun los demonios se nos sujetan en tu nombre”.  A nosotros también se nos ha dado autoridad para pisar serpientes y alacranes y sobre toda la fuerza del enemigo, sin sufrir ningún daño.

 

Con confianza, declaramos que somos siervos fieles del Altísimo Dios, parados ante  Él con corazones limpios.  Declaramos la guerra contra los espíritus de las tinieblas y lanzamos un ataque ofensivo poderoso hoy día contra Uds. en el nombre de Jesucristo.  La armadura de Dios todopoderoso nos protege: el cinturón de la verdad, la coraza de la rectitud, los pies calzados con la preparación del evangelio de la paz, el escudo de la fe, y el casco de la salvación.  Hoy somos potenciados por la espada del Espíritu de Dios, que es su palabra poderosa.

 

Escúchennos, espíritus de las tinieblas.  Unidos en pleno poder y autoridad, los atamos en el nombre de Jesucristo de Nazaret.  Abandonen su influencia sobre nuestras vidas personales en este momento.  Resistimos a los espíritus de idolatría, confusión y religión.  Derribamos las fortalezas en nuestras vidas personales: el conflicto, la hostilidad, la discordia, la crítica, la tibieza, la tentación, los pensamientos negativos, el temor, la preocupación, la depresión, el desánimo, la condenación, la autoimagen baja, la adicción a la comida, el alcohol, las drogas, los cigarros y hábitos viciosos, y la pobreza.  Rompemos toda maldición y toda oración orada en contra de nosotros contrariamente a Dios y su Palabra.  Caminamos en amor, gozo y paz.  Tenemos la mente de Cristo y somos potenciados por la salud y sanidad divinas. En Cristo Jesús, todo lo podemos y tenemos la expectativa rotunda de lograr las obras y alcanzar las metas que Él nos ha encargado.  Nada nos parará.

Denunciamos toda atadura a la brujería, el ocultismo, y actividades satánicas y paganos.  Nos sometemos al Dios altísimo y resistimos a toda clase de maldad.

En la autoridad del nombre de Jesucristo, declaramos que nuestros hogares están llenos de paz, protección, provisión y alegría.  Reclamamos el favor comercial dondequiera que vayamos.

Derribamos las fortalezas en nuestras iglesias y sobre nuestra ciudad y nación: la arrogancia, la altanería, la contienda, la religión, la perversión, el dinero, la adicción, la hechicería, el asesinato, la guerra, el temor, la ira, la avaricia, la muerte, la pobreza, la enfermedad, y el engaño.  ¡Mandamos que se bajen de sus lugares altos!  Nuestro Padre Dios nos prometió en su Palabra que vamos a “poseer las puertas de nuestros enemigos”.

¡Cesarán su reino y dominio!  Todo fue creado por medio de Jesús y sin Él nada fue creado.  En Él estaba la vida, y dicha vida era la luz de los hombres, y la luz resplandece en las tinieblas y las tinieblas no entendieron ni prevalecieron.  Uds. son impotentes y no pueden parar el despertar de justicia en los corazones de los hombres, las mujeres y los niños en nuestra ciudad y nación.  ¡Lavados y purificados por la sangre del Cordero, los hijos de la Luz penetramos sus fortalezas de maldad y libertamos a los cautivos hoy día en el nombre de Jesucristo!

Y ahora, adoramos y audazmente proclamamos las alabanzas del Dios todopoderoso.  Le damos toda la gloria por la libertad, restauración y victoria en cada área de nuestras vidas.  ¡Amén!